Bisho y Tortu nos explican la partida con el reglamento recien llegado de Stargrave en PDF (en unas semanas llegan en formato físico a varios socios del club):
En el Planeta Helado, entre los escombros de lo que en su día fue una base militar, el Culto ha detectado la presencia de unos Verdes intentando aprovecharse de los pocos recursos que quedaban entre los restos aún humeantes.
El Culto ha tomado medidas para escarmentar a esos intrusos y ha enviado a un escuadrón especializado y que no vuelvan a intentar saquear sus dominios.
En los primeros momentos ha habido dos turnos de acercamiento, sin disparos ni sorpresas.
Una vez las dos bandas se han acercado a los botines han empezado las disputas, primero a cierta distancia convirtiéndose rápidamente en altercados a mano abierta.
El Culto ha conseguido salir de la base con tres de los cinco botines mientras que los Verdes se han podido llevar dos, confiando en que las ruinas aún contienen muchos más botines para intentar saquear otro día.
El juego es dinámico y rolero, desde la creación de la banda, con perfiles temáticos para capitán y 1r oficial, así como el hecho de poder escoger tus miniaturas para representar tu facción sin estar ligado a ningún fabricante o escala, simplemente recomiendan mantener las peanas entre 25 y 32 mm, permitiendo esto tener minis muy variadas y totalmente personalizadas.
Además son pocas, solo 10, y se puede uno recrear en el proceso. O bien reaprovechar minis que ya tenemos en el armario y darles una segunda vida.
Las acciones están bien resueltas, conteniendo daños por caída, empujones, esos detalles que hacen que un buen o mal movimiento marque la diferencia en un combate cuerpo a cuerpo.
Los botines son de dos tipos distintos, físicos y digitales, obligando a tener entre tus filas a diferentes tropas para obtener un bonus u otro a la hora de descubrirlos, dando color a las bandas.
El único punto que generará adeptos y detractores es el uso de un único dado y tirada para determinar tanto el impacto como el daño.
No estamos ni a favor ni en contra, simplemente es la característica más peculiar del juego.
Esto convierte las tiradas en algo muy aleatorio, pudiendo hacer un impacto con un francotirador sin causar el más mínimo daño o que un “simpático perrete” te saque un impacto crítico y te elimine a un veterano.
Esto que a priori se puede interpretar como algo muy aleatorio es una característica intrínseca a los juegos de pocos dados, donde las probabilidades tienen más bien poco que decir.
Pero podemos perfectamente recrear situaciones más roleras o peliculeras para justificarlo como el francotirador que acierta el blanco pero solo hace una herida superficial porque en ese momento el objetivo se desplaza hacia un lado o el “simpático perrete” que te muerde en la yugular.
El juego eso sí, está muy encarado a ser jugado en modo campaña, donde tu banda irá adquiriendo riquezas, objetos, armas, habilidades, personajes y sufriendo bajas. Lo que dará un toque aún más personalizado a tu banda.
De ahí que ya haya diversas expansiones en modo campaña, aún por traducir. Pero no queramos correr más de la cuenta.
El siguiente paso será probar alguno de los escenarios de campaña donde se detalla tanto la mesa, en distribución como contenido, como diferentes objetivos y botines a conseguir, desde datos a expulsar alienígenas o liberar a miembros cautivos de tu tripulación.
Una primera toma de contacto que ha dejado buen sabor de boca y ganas de más acción.